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| Revista Arbil nº 81 | |||||
La intervencionista Agencia Pública de Alquileres por Luis Losada Pescador El gobierno quiere solucionar el problema de la vivienda mediante la intervención pública. La creación de la Agencia Pública de Alquileres será tan poco eficaz en el mercado inmobiliario como el INEM en su labor de intermediario laboral. ¿Por qué no reformar de una vez la Ley de Alquileres? | |||||
| Ganan los políticos sobre los tecnócratas. Los globos sondas del Secretario de Estado de Economía, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, han merecido importantes críticas internas. De privatizar Renfe, nada de nada. Sobre la privatización parcial del Ente Público, ya veremos. El diario de Pedro Jota se frota las manos, pero lo más probable es que en caso de afrontarse una privatización parcial de RTVE el comprador fuese Jesús Polanco. La deuda sería traspasada al Estado, por lo que el balance quedaría virgen. Heredaría, eso sí, a unos trabajadores sindicados que dominan la legislación laboral y desconocen los hábitos del trabajo y los principios del periodismo. ¿Quién mejor que don Jesús para lidiar con esa tropa? Probablemente Pedro Jota montaría en cólera, pero "estando yo caliente, ríase la gente". ¿Y el pluralismo informativo? Ahí están Antena 3 y Tele5... Esto será todo el "liberalismo" socialista. El discurso del talante y el diálogo se convertirá en más intervención sin apenas crítica alguna. Al fin y al cabo, la política y la sociología española son bastante socialdemócratas. Si la administración propone sacarnos los moquitos y arroparnos por las noches, probablemente aplaudamos. Y así, la propuesta de la Ministra de Vivienda, María Antonia Trujillo, de crear una Agencia Pública de Alquiler, ha pasada prácticamente desapercibida al juicio. El gobierno pretende crear un registro de casas para alquilar. La Agencia tratará entonces de casar oferta y demanda ayudando a los inquilinos con menores niveles de renta y asegurando el cobro al propietario. El procedimiento es parecido al desarrollado en el País Vasco. El gobierno regional localiza al propietario de vivienda desocupada mediante los indicadores de ausencia de consumo de servicios público (agua, gas, teléfono, etc). Le ofrece una renta ligeramente inferior a la de mercado, pero garantizada por el gobierno vasco. Obviamente el propietario suele decir que sí, porque tiene la garantía de cobro del gobierno vasco. De esta forma, el gobierno realiza una base de datos de viviendas y casa oferta con demanda. Lo que no termino de entender es por qué la administración debe de actuar de intermediario en el mercado inmobiliario, por qué considera que sus servicios serán más eficaces que los de las actuales agencias y portales inmobiliarios, y por qué compite deslealmente con una actividad privada y legitima de intermediación. La experiencia del INEM en la intermediación laboral resulta lamentable. Casi ningún trabajador confía en los servicios públicos de contratación para encontrar un empleo. Y prácticamente ningún empresario recurre al INEM para completar sus plantillas. ¿Es necesario experimentar todavía más? ¿Quién va a pagar a esos funcionarios de la nueva Agencia Pública de Alquiler? ¡Bingo! Siempre pagamos los mismos... Por otra parte, el gobierno podría preguntarse por qué existen tres millones de viviendas desocupadas, por qué el propietario renuncia a la obtención de una renta. A lo mejor es que la Ley de Alquileres le deja desprotegido frente al inquilino y prefiere no incurrir en riesgos. Porque por muy rico que sea uno, a nadie le amarga una renta. ¿O si? A mi no.. El problema pues, no es de mercado, sino de regulación. ¿Es tan difícil de ver? ¿A qué espera el gobierno para modificar el actual marco regulatorio? Si los derechos de propietario e inquilino se compaginan, el mercado se creará sólo, sin necesidad de incurrir en gasto para generarlo. Y no es que exista una "mano invisible" que ordena los egoísmos individuales generando un bien común. Lo que ocurriría es que los intereses de inquilinos y caseros, coincidirían. ¿Un mundo feliz? No, realidad empírica. Sra. Trujillo, compre algún día el Segundamano. Si lo que pretende la Sra. Ministra de Vivienda es proteger a las personas de menores rentas para que puedan también acceder a una vivienda, fácilmente podría establecer una ayuda a las rentas más bajas o fomentar la VPO en su modalidad de alquiler. O sea, fórmulas ya inventadas. No se trata de descubir la rueda. Se trata de que el coche marche a la velocidad necesaria. Y a veces, hace falta que la administración aporte el empujón inicial. Y ese se llama desregulación, no intervención. ·- ·-· -··· ···-· | |||||
Revista Arbil nº 81
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