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Di no a la constitución antieuropea,   totalitaria y tiránica

Por una nueva Jurisdicción

por Miguel Ángel Loma Pérez

De nuevo la ironía como fórmula de denuncia, esta vez de la telebasura, cuyo éxito es el síntoma alarmante de una sociedad degradada

Al Consejo General del Poder Judicial

Andrés Pañolito Medio, mayor de edad, en pleno uso de mis facultades, algo mermadas tras el padecimiento de largas horas de sufrido televidente, pretendiendo echar una mano a la justicia en lo que pueda, y se deje, ante ese alto Consejo me compadezco y

DIGO:

Que viendo lo que uno ve y oyendo lo que uno oye, tal y cómo está de revuelto el patio mediático con el imparable y crecido protagonismo de famosos, famosillos y famosetes, que saltan y asaltan de cadena en cadena con el beneplácito, hospitalidad y millonaria generosidad retributiva de productores y directores de programas televisivos y prensa del corazón que, pobrecitos ellos, sólo se limitan a darnos la bazofia que les demandamos, según nos demuestran fehacientemente con las mediciones de audiencia y videncia que ahora se denominan «share», considero de urgente prioridad la creación de un nuevo orden jurisdiccional cuyo objeto exclusivo sea el conocimiento de los trascendentales asuntos relacionados con las demandas, denuncias, querellas, interdictos, secuestros de vídeos, prohibición de apariciones, intervenciones, réplicas y contrarréplicas, etc., generados por problemas de bragueta y casquería sentimental, que requieran para su pacífica (es un decir) resolución, la intervención de jueces y demás profesionales del Derecho. Dicho orden jurisdiccional tendría como finalidad descargar a la jurisdicción ordinaria (con perdón) de un tipo de asuntos que, si atendemos a la veracidad de todo lo que se dice y cuenta en la tele, constituye sin ningún género de dudas la actual causa del colapso judicial existente en nuestro país.

Esta petición la fundamento en las siguientes

Alegaciones (y consejos al Consejo)


Primera: Que pese a que en las encuestas del CIS el personal siempre responde que lo único que ve en la tele son los Documentales de La 2 sobre la triste vida de las tortugas de Pernambuco y sus graves problemas para el apareamiento con los cada vez más inapetentes tortugos, la cruda realidad nos demuestra que lo que realmente preocupa a la gran mayoría de nuestra gente son los amores, desamores, noviazgos, matrimonios, separaciones, nulidades, divorcios, arrejuntamientos, «ahítequedas», embarazos, prepartos, pospartos, cuernos, recuernos, rabos, oreja y vuelta al ruedo mediático, generados por los inefables protagonistas de los programas basurilla y demás zurrapa pseudoinformativa, que tienen en vilo al personal ante la llamada caja tonta, que de tonta no tiene un pelo porque bien sabe lo que busca con este tipo de programación.

Segunda: Que de todos es conocida la feraz hemorragia de solicitudes, reclamaciones y demandas que nacen de las generosas relaciones de estas nuevas estrellas mediáticas, hemorragia agravada además por la circunstancia, nada desdeñable, de que no son personas, personajes o personajillos que tengan un abogado, como suele suceder con todo hijo de vecino que no sea un magnate de las finanzas, sino que disponen de una pléyade de profesionales del Derecho a su servicio, como demuestran las expresiones tan habituales que salen por sus siliconados labios, en frases como «Eso ya está en manos de mis abogados», o aquello otro mucho más contundente, de «Mis abogados tevanameté una demanda porlopená que te vasacagá porlas patasabajo», y otras advertencias jurídico cautelares de similar naturaleza.

Tercera: La denominación de este nuevo orden jurisdiccional podría ser muy bien la de Jurisdicción del corazón, Jurisdicción de la entrepierna, del bolsillo, o de donde finalmente se compruebe que corresponda, ya que no se sabe bien en dónde radica exactamente el origen de los inconfesables intereses de este tipo de justiciables. (Pero por favor, que ni en broma se denomine nada relacionado con la extinta Jurisdicción del Trabajo, que con solo con oír esta palabreja podrían ser presa de un ataque de vómitos, regüeldos y flatulencias variadas, que echarían a perder todo el glamour con que se envuelven estos personajes).

Cuarta: Las salas y habitáculos donde tuviesen lugar las celebraciones de las vistas relacionadas con este tipo de asuntos, deberían estar habilitadas para acoger delegaciones y representantes de la denominada Prensa del corazón, y de esta manera no tener que padecer los numeritos de carreras, desmarques dentro del área y quiebros de cintura, de estos personajes por los pasillos de los Juzgados, perseguidos por los chicos y chicas de la prensa que, alcachofa en mano y cámara en ristre, tanto turban y perturban el pacífico desenvolvimiento de los asuntos ordinarios de las demás jurisdicciones. Asimismo sería conveniente que tales salas dispusieran (al igual que sucede en los centros deportivos) de cabinas con equipamiento técnico necesario para proceder a la emisión en directo del desarrollo de los juicios. Y ya puestos, tampoco vendría nada mal la creación de un nuevo cuerpo de funcionarios judiciales especializados en maquillaje y retoques faciales, e incluso implantaciones sobre la marcha de inyecciones de toxina botulímica, que no hay derecho a que te cojan con la carita lavada y recién salido de tu casa, en unos primeros planos que quitan todo el glamour. Ni que decir tiene, que las togas que utilizasen los profesionales de la justicia en este tipo de asuntos, podrían ser de vivos y atrevidos colores, superando el ceniciento y triste color negro con el que tanto gusta adornarse la justicia, como si eso de pisar los tribunales como querellante y querellado, acusador y acusado, demanadante y demandado, no fuera una actividad gozosa, divertida y lucrativa.

Quinta: Igualmente, y como elemento de auxilio judicial para evitar el estrés o incluso el escuatro, que implicaría un exacto conocimiento de los antecedentes que este tipo de asuntos producirían en los jueces, sería muy conveniente la dotación en cada Juzgado de un grupo de asesores compuesto por tertulianos especialistas en la materia procedentes del mundillo rosa. Esta sería la única fórmula eficaz para evitar las agotadoras sesiones previas que exigirían a cada juez llegar a un conocimiento medianamente acertado sobre las relaciones existentes entre las partes (del proceso), y descifrar que, por ejemplo, uno de los grandes personajes que puede suscitar el máximo interés popular puede ser la ex amiga del ex novio de la amante del chofer de una joven que mantuvo una relación con un tipo que pasó una semana en la casa del Gran Hermano, y con el que tuvo una hija que aparece con un tomate en la cara cuando a la inocente criatura la sacan por la tele.

En fin..., que por lo expuesto,

SOLICITO: Que atendiendo al buen orden y concierto de los juzgados y tribunales, y para su mejor desarrollo y funcionamiento, sea atendida mi petición en todos sus puntos.

Por ser todo ello de justicia (aunque no estoy muy seguro) que pido (¡será por pedir!) en Sevilla, a principios de un siglo XXI que, de continuar tal como va, no sabemos muy bien en donde acabará.


(Por la transcripción: Miguel Ángel Loma Pérez)

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Miguel Ángel Loma Pérez

 

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